Uno de los pasos más importantes en la gestión del riesgo por micotoxinas es monitorear la presencia de micotoxinas en las materias primas y los alimentos acabados. Por este motivo, Olmix ha creado el programa Myco’Screen Overview, cuyo objetivo es colaborar
con laboratorios independientes en todo el mundo. Así, Olmix ha establecido una colaboración a largo plazo con Labocea, un laboratorio independiente francés que realizar análisis de micotoxinas con un dominio específico sobre la cromatografía líquida en tándem con espectrometría de masas, que permite la detección de más de 45 micotoxinas por muestra analizada. Todas las analíticas se compilan en una base de datos que contiene alrededor de 15.000 muestras hasta la fecha, recogidas en todo el mundo entre 2013 y 2021. Esta base de datos muestra que las micotoxinas más importantes a nivel mundial siguen siendo el deoxinivalenol (DON), la zearalenona (ZEN), las fumonisinas (FUM), y dependiendo de la región, también las aflatoxinas (AFB1). Además, el 94% de las muestras de la base de datos muestra la presencia de 2 o más micotoxinas simultáneamente y el 75% de las muestras contienen más de 6 micotoxinas, indicando que la policontaminación es un hecho común.
Maíz
El maíz es la materia prima más frecuentemente contaminada, con un 99% de las muestras policontaminadas (n=3200). Las micotoxinas más encontradas en el maíz y sus derivados es DON: un 92% de las muestras están contaminadas con un nivel medio significativo de 755 ppb. Labocea analiza un perfil completo y cuantifica además de DON sus formas acetiladas, como el 15-O-AcetylDON, y otros tricotecenos como el nivalenol. Estas micotoxinas son menos conocidas, pero se encuentran frecuentemente y se considera que son incluso más tóxicas que DON. El 82% de las muestras de maíz y sus derivados dan resultados positivos para 15-O-AcetylDON y el 60% para nivalenol, que son micotoxinas dos veces más tóxicas que DON. Las micotoxinas parecidas a DON se expresan como DON- equivalente (DONeq), que expresa DON y sus formas relacionadas incluyendo su toxicidad relativa en un único número. El 94% del maíz y sus derivados son positivas para DONeq con un valor mediano de 1405 ppb, considerado como de alto riesgo para los animales.
Las muestras de maíz y sus derivados también muestran presencia de ZEA y FUM en un 79% y un 78% de las muestras respectivamente. Globalmente hablando, los niveles medianos de esas micotoxinas están en un rango seguro. Sin embargo, las muestras originarias de regiones con climas cálidos muestran una incidencia de FUM más alta, del 96%, con una contaminación mediana significativa de 1100 ppb. Similarmente, la incidencia de AFB1 en muestras de esas regiones aumenta de un 6% de muestras positivas a un 31%, con niveles medianos de contaminación que aumentan a 11 ppb.
Cereales de invierno
Los cereales como trigo o cebada son una Fuente importante de DON y sus equivalentes. Como estos cultivos crecen en climas más templados, se encuentran menos FUM y AFLA. De casi 2.000 muestras de cereales, un 85% contienen DON, y un 93%, DONeq. Sin embargo, solo en un 1% y un 13% de las muestras se han detectado AFB1 y FUM. Otras micotoxinas que se encuentran frecuentemente en estos cereales son los alcaloides del ergot, presentes en un 29% de las muestras (105 ppb).
Oleaginosas
Las oleaginosas, como la soja o la colza, no son tan importantes desde el punto de vista de la contaminación con micotoxinas. En la soja y sus derivados, en un 40%, 29%, y 59% de las muestras (n=173) se detectan DON, ZEA, y FUM respectivamente. Un 99% de esas muestras tienen niveles de las mencionadas micotoxinas en un rango seguro, con lo que el riesgo de la soja es bastante bajo. Similarmente, la colza y sus derivados también llevan un riesgo bajo por micotoxinas. De las muestras de colza en la base de datos de Olmix, sólo un 9% de las muestras presentan DON, un 21% para FUM y un 3% para ZEA. Todas las muestras en un rango Seguro de contaminación. Así, el riesgo de las oleaginosas es menos importante si lo comparamos con el del maíz o los cereales…